WN: 30 y 18 - Cap59

Capítulo 59

"Este es el tuyo"

El camino de regreso fue por demas tensionante, no por que nuevamente se encontrara esa rara atraccion y repulsion que habitaba en sus cuerpos si no por el hecho de que sin saber como Poncho tenia como acompañante a Ucker y no a la mujer de ojos azulitos que le encantaba.

- ¿Que le hiciste? - le preguntu su amigo luego de minutos, Alfonso no lo volteo a ver y dandole un fuerte giro al coche al momento de estacionar, respondio.

- Malditasea NO LE HICE NADA - fueron solo segundos donde la mirada cariñosa entre los amigos se conecto, ninguno dijo mas y casi en el mismo momento decidieron bajarse del auto sin decir algo mas alla de lo que decian ya las acciones.

Mientras tanto Anny habia impedido que Dul le preguntara algo, que medio le insinuara cualquier cosas con una de esas directas bromas.

- No vamos hablar de eso ¿Vale? - le pregunto al mismo tiempo que se abrochaba el cinturon, la mujer no pudo mas que asentir sabiendo de antemano que despues descubriria las cosas, aunque algo sospechaba.

Al estar todos en casa esta vez de los Ucker, fueron suscitandose un acontecimiento tras otro, los hombres terminaban de acomodar el comedor, la mesa posterior y el arbol que aun le faltaban algunos arreglos, y las mujeres -Porque segun ellos asi eran la tradicion- estaban en la cocina, dandole los ultimos detalles a la deliciosa cena que las tres mujeres mayores habian preparado, entre charla y charla, todas se lamentaron por no poder compartir esta noche con Chris y Mai, los cuales en su depresion por aun no ser padres se habian ido a una segunda luna de miel, Anny y Dul esperaban sinceramente que fuera lo mejor para el tensionado matrimonio.

Un par de horas despues y ya todos decentemente arreglados fueron acomodando los regalos que cada uno habia comprado para todos, resultaba realmente bastantes.

- Estas muy guapa - le susurro alfonso al oido a Anny mientras esta se encontraba sentada en el suelo tratando de acomodar todo lo mejor posible, sorprendida lo volteo a mirar.

- Gracias - un pequeño sonrojo cubrio sus mejillas - tu tambien estas muy bien - porque pese a que la imagen recurrente que Anny observaba de Alfonso era en traje como estaba aquella noche, justo ahi se podia ver diferente, desprendia un brillo especial... extraño y especial.

- No tanto como tu - le extendio la mano para que ella se levantara, al estar esta en pie hizo que girara en su propio sitio mientras sus ojos divisaban aquella segunda piel, llamada vestido de Anny.

- Gracias - lo empujo un poco - es mejor que te hagas para alla - decia firme.

- ¿Por que? - pregunto contrariado.

- No quiero que por vernos tan juntos piensen otra cosa.

- Anny... no digas tonterias, por favor - murmuraba, mientras se trataba de acercar, ella con sus manos lo empujaba fuerte.

- Es mejor asi, compermiso - hizo una seña a su mama que pasaba y contra eso Poncho no pudo hacer mas , la miro mientras se recostaba en el mullido sofa lamentandose cada vez mas lo hecho hace dias, en ese momento alguien interrumpio sus pensamientos.

- Te lo dije - replico con su ronca voz.

- No me vengas con eso Christopher - Debo hacerlo - le replico el aludido.

- No, tu debes apoyarme.

- No me vengas con tonterias Alfonso, somos amigos... es mas eres mi hermano, pero no por quererte - hizo una mueca para que este no se la creyera demasiado, no podia demostrar tanto ante el, ante su amigo... bobadas de hombres - voy a mentir, debes de ser sincero y admitir que te lo dije.

- Quieres que lo admita por tu propio ego o por mi bienestar.

- Por ambas cosas - rio - es broma, tu sabes que es por ti Alfonso, se que es duro... lo sabre bien yo - volteo a ver a Dul que se reia con su madre - pero cuando dejas de luchar contra eso, simplemente es magico.

- ¡Que cursi! - se tiro encima de su amigo, mientras se empujaban uno contra el otro, riendose embriagando ese lugar de viejos momentos, cuando eran solo unos jovenes en la misma festividad y su pequeña hermana de Dul los separaba con sus pequeñas manos de niña, pidiendoles que no pelearan, ambos se separaba y Alfonso cargaba a su hermanita.

- No peleen - Dijo ya no la niña, si la mujer, los hombres atabiados en un fino traje la voltearon a ver recordando lo mismo que la sonrisa de ella demostraba.

- Me imagino que esta vez no vas a querer que te cargue yo - la cogio por la mano y de un tiron la coloco en sus piernas - ¿O si hermanita? - esta se acomodo en las piernas de su hermano sintiendose realmente cuidada.

- Bueno pues... - se hizo la timida.

- Ya! ya!! vete con el - la cargo por los aires para colocarla en las piernas de su amigo - No te lo voy a perdonar - le dijo a Ucker - me robaste a mi hermanita - se levanto del asintio con gesto indignado, dio pasos dandoles la espalda y a lo lejos escucho que Dul le gritaba.

- Te amo - el rio fuerte y le respondio que tambien.

- No es por nada pero me muero por abrir los regalos - replico Dul unas horas despues.

- Yo tambienn - pidieron Ucker y Anny sin ponerse de acuerdo.

- Vamos - comenzo el padre de Anny - o si no, estos niños no nos dejaran en paz.
Poco a poco todos se fueron acomodando al rededor del arbol, abrian uno tras otro, llenando de sonrisas el lugar y uno que otro grito al ver los regalos del bromista de Ucker, o al menos esos falsos regalos que solo causaban risas y luego sonrisas sinceras al observar los ultimos.

- Este es para ti - le comento Anny al entregar al entregarle una pequeña cajita a Alfonso, era el unico que le faltaba por entregarle - lo compre desde hace dias, pero creo que es buena idea entregartela ahora - admitio con una sonrisa mientras observaba a un emocionado Alfonso abrir su regalo, era un reloj, el le agradecio con la mirada, ella supo que esperaba otra cosa y al oido para que nadie lo supiera.

- Dale vuelta - el asi lo hizo, un poco nervioso al sentir ese citrico olor del cuerpo de Anny cerca de el.

"AyA 4/10/2009", Alfonso lo observo una y otra vez, no pudo mas que sonreir, esta vez si sinceramente, eran sus iniciales y la fecha en que se habian conocido, realmente era magico, se acerco a Anny y le dio un fuerte abrazo que no paso desapercibido por ninguno de los alli presentes que entre los animos navideños no pudieron evitar gritar al unisono "UYYYYYYYYYY" apenados se separaron.

- Este es el tuyo - le extendio un grueso sobre Alfonso a Anny, ella lo tomo temblorosa y luego de unos minutos se alejo dellugar para ver que era.

Al abrirlo se encontro con una hoja un poco mas grande que las demas y pocas un poco mas chicas, decidio tomar la grande.

"Hola...
Nunca pense escribir una carta, pero aqui me ves..."