5 mar 2010

WN: 31 y 19 - Cap26


Capitulo 26 
¿Aquello es amor?

Amaba el momento que estaban viviendo, disfrutaba sentir su cuerpo lleno de sudor, su respiración agitada y la sensación que era el percibir cada poro de tu ser, ardiendo... feliz, satisfecho; la decisión de hacerlo fue realmente sencilla, al notar el día que era, su cuerpo se movió solo; reconocía que ambos necesitaban ese espacio, para celebrar la fecha... para no dejar de conmemorar aquel momento.

Acaricio el pecho desnudo del hombre, haciendo diferentes formas, creando en él diferentes sensaciones, reconocidas pero inigualablemente únicas, cada vez que se creaban... ambos suspiraron, tomando sus manos y mirándose por millonésima vez aquella noche, la tensión paso por la mirada de ambos.

Era verdad, estaban juntos... se habían amado, devorado, pero estaban preocupados; era la primera noche que no estaba junto a ellos, que conocían el silencio en la noche después de tres meses... era tan unico, haber escuchado gemidos y llantos por sus propias bocas y, no por la pequeña de su bebe... de su hijo.

-Tranquilo, él esta bien - Murmuro Mai, en su intento por tranquilizar a Chris y mitigar su propia angustia, Chris sonrió complacido por el gesto... - Mi mama lo esta cuidado y realmente creo que lo hace bien o ¿Tu que crees? - Lo reto a responder, a que le dijera que tal la habían criado, Chris beso su cabellera esparcida en su pecho.

-A ti te criaron perfectamente - Murmuro cerca a su oreja - Solo que es extraño no tenerlo acá ¿Me entiendes? - Quiso saber, Mai asintió mientras sonreía se sentó en la cama, dejando su pecho al desnudo, a la vista de Chris.

Sus cuerpos desnudos, hacían un choque de energías glorioso, ella lo sabia y lo había gozado todo ese tiempo... sin inhibiciones, exceptuando aquella noche.

-Deja de pensar en ello - Le pidió Chris...

-Gracias por aceptarme...- Repitió Mai, acobardada otra vez, Chris viro los ojos...sorprendido por tener que repetírselo de nuevo.

- Te lo dije hace unas horas y te lo repito ahora - Murmuro serio, mientras se sentaba junto a ella, despojando la sabana que medio los cubría - Eres la mujer mas hermosa que conozco, eres mi mujer... mi novia, mi esposa... mi compañera de vida, Mai; recuérdalo y que no se te olvide, deja de preocuparte por esto - le indico mientras acariciaba su abdomen, el cual aun le faltaban algunos kilos por bajar, Mai se estremeció por la caricia - Olvídate de ello, porque esto me hace Amarte mas, saber lo abultada que estaba por nuestro pequeño, hace que todo mi cuerpo se excite de solo pensarlo - Le demostró mientras se acomodaba para que ella lograra ver su miembro erecto.

Sus miradas se conectaron nuevamente, sin mentiras… sin pretender ir mas allá, simplemente con silencio, buscando las palabras que sus labios no conocían, como lo habían hecho siempre y cada vez, formando su propio lenguaje que solo sus cuerpo reconocía, creando su propia historia que solo sus corazones contarían… era amor…

-Te amo... por lo que eres, porque me dejas ser, realmente no hay razones para no Amarte - Mai lo termino por callar, besando sus labios con devoción, con un amor profundo... con el mismo de hace 13 años, cuando se hicieron novios por primera vez y para toda la vida.

-¿Quieres ser mi novia? – Le volvió a preguntar antes de penetrarla por segunda vez aquella noche, repitiendo aquella pregunta que murmuraba cada día, cuando celebraban el día que se hicieron novios… aun ya de esposos.

¿Aquello es amor?
Es Vida.

***

-¿Toda la vida? - Repitió la ultima parte de aquella pregunta, tan sorprendida como extasiada, ¿Había escuchado bien? estaba confundida, no podía dar crédito; dirigió su mirada nuevamente abajo, allí estaba él, aun arrodillado frente a ella, con esa media sonrisa que comenzaba a desaparecer... Dul sonrió.

-Perdóname...- Dijo, completamente arrepentido; de pronto si se había adelantado, pero su corazón creía que era el momento, que realmente estaban listos, sus corazones, sus vidas y sus destinos estaban listos para aquello, el gesto sorprendido de Dul, le indico que no era asi.

-Perdonarte ¿Por qué? - Dul enmarco el rostro compungido de Ucker.

-Me adelante Dul, pero no te asustes... yo sabré esperar - Murmuro desolado, comprendiendo lo que según él, Dul demostraba con sus gestos, era verdad estaban solo a punto de cumplir un año de novios, pero para él y estaba seguro que para ella, era como cumplir mas de una década; con aquel amor platónico que fue lo mas real que tuvieron en su vida, por ello era que se había animado, que cuadro todo con tanto ahincó, para que fuera perfecto... tal y como ella, él mismo y su amor se lo merecía, en el mismo lugar donde este le había pedido que fuera su novia y que habían tenido su primera vez, era perfecto... y, él realmente creyó que el final de la noche seria diferente.

-Ucker, yo no estoy diciendo eso... no quiero que te disculpes por algo que sientes de corazón ¿Por qué es asi, cierto? - Quiso constatar, Ucker asintió con fuerza... - Lo ves, ambos quedamos en que no mas reprimir lo que sentíamos, ello nos impidió estar juntos desde hace mas tiempo... - se recrimino, siempre era duro dejar de pensar que si tan solo se hubieran animado antes, un año antes... tan solo un segundo antes, la vida hubiera resultado un poco mas sencilla - Y, yo realmente te agradezco que lo hagas, yo...

-Pero aun asi, no puedes aceptar es eso ¿verdad? - No la dejo terminar, se sentía triste... dejando ir la magia de sus manos.

-Pero aun asi, no puedes dejarme terminar...- Lo regaño - Lo que quiero decirte es que, has sido mi amor platónico, mi base... mi trampolín, mi novio... y, muero por decirte que si, es mas lo estoy diciendo en este preciso momento... te amo Christopher Uckerman, y muero por ser Dulce Uckerman...- Sonrió, complacida por el brillo en los ojos de su ahora prometido, era una luz de niño con su dulce preciado, era perfecto... era mágico.

¡NOS VAMOS A CASAR! - comenzaron a gritar ambos, tomados de la mano, abrazados... enamorados, formando en aquel lugar, su lugar... magia.

¿Aquello es amor?
Es Magia.

***

No resulto tan difícil expresarlo, al final lo complicado fue mantenerse frente a él, viendo como su rostro pasaba por cada una de las emociones, cada unas¡ mas desoladora que la anterior… el enfado se disipo en el aire como un suspiro, para penetrar una profunda tristeza, que la hizo sentirse culpable, por solo instantes, aquellos donde hubo el cambio entre el dolor y una emoción confusa, que ella no supo o no quiso descifrar.

Estaba allí, frente a él y la sentía tan lejana, tan distante de lo que alguna vez crearon, sintió como cada uno de los recuerdos se fue cayendo al suelo, formando pedacitos cortantes, que lo iban lastimando... que los iban lastimando, a ambos... no podía dejar de ver el dolor y la desesperación que existían en aquellos ojos azules, que lo miraban arrepentido.

Se sorprendió por la diferente tonalidad de cosquilleos que percibió en sus manos, quería lastimar a alguien por la rabia que lo recorría por dentro, luego le dolieron hasta el alma por la impotencia que sentía su alma, al no poder gritar "¡¿Por qué, por qué la perdí?!" era ridículo, su rabia, se tornaba en una desalentadora tristeza, para llegar a esto... al recuerdo de las palabras de Pedro, a la forma en como ellos dos se llevaban pese a la relación que tuvieron... y, deseo tener aquello, quiso poder ser en la vida de Anny, alguien importante pese a que no fuera de la forma que dentro de si, anhelaba.

-No me dejes - se escucho en el aire, ambos se miraron extrañados, ¿Quien lo había pronunciado? ¿Quien fue el atrevido que se animo a gritar lo que sentían ambos?
¿Importaba quien fue ese?

No, ya lo habían escuchado, uno de los labios del otro... se acercaron un poco mas, dando pasos cortos pero persistentes, estiraron sus manos para irse tocando, sus dedos, sus manos... el contacto tibio de sus cuerpos, en aquel abrazo que se formo al final.
Aprender a amar resultaba extraño, respetar sus tiempos, explorar sus silencios y captar a tiempo sus señales... aceptar, que de repente no eres solo tu, que en el mundo hay otra persona que debe trascender, crecer y vivir a tu lado... que forma tu mundo de algo diferente, que lo hace mas grande... tal vez un poco imperfecto, pero al final tuyo; tal y como siempre lo deseaste.

No lloraban, estaban clavados a aquella calle de cemento, que los sostenía débilmente; no sentían nada, de repente sus sentidos dejaron de funcionar, no querían escuchar las sirenas que no paraban en la ciudad, no deseaban ver que su realidad era la separación, no se permitían sentir el olor y saborear la delicia de lo que era el otro y, tocarse... sentirse, bueno, aquello era imposible no hacerlo... sus cuerpos se buscaban.

-Nos prometimos demasiadas cosas... ¿Cierto? - Lo cuestiono ansiosa, mirándolo lentamente, Poncho asintió.

-Nos prometimos un "Hasta siempre" y, yo creí que lo cumpliríamos...

-Yo quise cumplirlo, creo que ambos quisimos - Decidió admitir Anny, sin sentido ya de culpar solo a Herrera, Poncho volvió a asentir.

-Nos equivocamos en creer que éramos perfectos - Susurro con pesar, con decepción...

-Tu amor a mi me hace mejor... me daba todo lo que siempre soñé y soñé en esa perfección, el golpe dolio pero...- sollozo - no se como hacerlo, no entiendo como es la ecuación que debo  aplicar para borrarte...

-No me borres - "No podría" - completo con premura ella - Perdóname - le repitió Alfonso.

-Ya te perdone - Murmuro sin titubeos, sin enojos con una profunda sinceridad que descoloco a Alfonso, enmarco su rostro lentamente y, quiso acercarse un poco mas... Anny se lo impidió - Yo ya te perdone, pero estoy con él...

-No lo amas - le aseguro...

- Lo se, pero los dos ya nos hicimos demasiado daño... y, no quiero hacerte mas, no puedo darte la oportunidad que me lo hagas a mi...

-No pienso hacerlo...

-Se que no, pero... - suspiro - llego a pensar, que algunas veces no somos, no hacemos; propiamente lo que queremos, si no lo que las circunstancias quieren...

-¿Acá se acaba nuestra promesa de amor eterno? - Dudoso pregunto, Anny sonrió... mientras un leve "No" salía de sus labios.

-Yo te prometo hoy, lo mismo que ayer; que hace algunos meses... Amarte para toda la vida - Sonrió, con lagrimas en sus mejillas.

-Yo... - hizo un mohín con sus labios - fui el que no cumplió, te hice daño... te engañe, no te cuide, no cuide nuestro amor... pero, aun asi te prometo Amarte toda la vida, eres la mujer que quiero para que este conmigo... HASTA SIEMPRE.

Se miraron en silencio, compartiendo mas cosas de lo que las palabras podrían expresar, estaban nerviosos y ansiosos... se amaban, pero ya se habían esquivado tanto, que ahora se habían perdido...

Él le rompió el corazón y ella, lo perdono.

Ella le rompe ahora el corazón y él, la perdonaba.

-Acepto lo que nos pasa - sentencio Poncho, Anny sorprendida asintió, esperaba otra cosa; tal vez una ultima lucha, alguna palabra que la hiciera a  ella, correr hacia a Tomas y decirle, perdóname lo amo a él, paso por su lado... - Acepto eso, pero te pido una cosa... ahora soy yo, el que pide - le murmuro en oreja.

-¿Qué? - Temblorosa cuestiono.

-Una noche, un momento donde te pueda demostrar cuanto te amo, juntos... amándonos, poder sentir hacerte sentir lo que hay acá - señalo su corazón y su mente - para que te convenzas que solo te amo a ti... - enmarco su rostro - Una noche... tu y yo, juntos.

¿Aquello es amor?
Si.

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